Los dragster estadounidenses
siempre me llamaron la atención cuando era chico. Esos monstruos con motores
inmensos, que solo servían para una carrera corta. Una picada diríamos en
Argentina. Ahora conocemos esas carreras como de cuarto de milla. Este Dodge
Charger con el motor por fuera del capot es un exponente digno de esa categoría
de automóviles.
Mauricio
Uldane
Editor
de Archivo de autos
Archivo de autos no
cuenta con ningún apoyo publicitario. Es un sitio editado por una sola persona
de forma artesanal, con los pocos recursos técnicos que dispone a mano.