Lo más cerca que estuve de un automóvil
De Tomaso fue este Mangusta a escala 1:25. Incluso lo tuve en mis manos, claro
si es una miniatura. De los “autitos de colección” fue, y es, la pieza más
valiosa. La joya de esa colección de la infancia. La verdad que no era para
jugar, era para admirar.