Llevar automóviles de fabricación
nacional a bordo de la Fragata Libertad fue toda una tradición. Así en el viaje
anual de dicha nave el capitán de navío contaba con un vehículo de producción
de la industria automotriz argentina. En esta ocasión el automóvil elegido
había sido un Morris 1650 fabricado por CIDASA (Compañía Industrial de
Automotores SA), empresa satélite de IKA (Industrias Kaiser Argentina SA).