Los automóviles eléctricos tuvieron un notable desarrollo en varios países europeos entre finales del siglo XIX y comienzo del siglo XX. La baja velocidad de esos primeros automóviles facilitó la existencia de autos de tracción eléctrica en especial en vehículos de uso comercial. Hoy veremos un auto eléctrico italiano de 1906: el Ausonia.