Que las empresas automotrices europeas
fabricaron unidades para monarcas de todo el mundo no es una novedad. Cuando
pensamos en automóviles para la realeza, en el pasado, nos viene a la mente el
Rolls-Royce. Pero hubo otras marcas europeas que hicieron automóviles por
pedido de reyes, condes, barones y beyes. Los beyes eran los monarcas de Túnez
y la empresa Peugeot fabricó un único ejemplar del Type 4 en el año 1892 para
el bey Ali III ibn al-Husayn. Hoy veremos cómo era ese automóvil de finales del
siglo XIX.
Peugeot Type 4 del año 1892 fabricado para el bey de Túnez. |