En los años sesenta hubo, en Argentina,
una parafernalia de accesorios para darle un “toque” deportivo a los automóviles
de fabricación nacional. Entre esos artículos que disponía el conductor “tuerca”
eran las tazas deportivas.
Ahora vista desde el siglo XXI nos
parecen comunes y corrientes. Incluso buena parte de automóviles de gama baja y
media traen tazas plásticas con remedo deportivo, que tienen la costumbre de
salirse en cualquier parte.
Como también están las que solo cubren
por completo la llanta que no tiene el mejor de los aspectos, ni presentan una
pintura acorde con el automóvil. Pero la empresa Osvaldo Miguelez y Cía. era la
encargada de fabricar tazas deportivas para los siguientes automóviles
argentinos: Torino, Rambler, Peugeot 403, Peugeot 404, Renault y Renault
Gordini. Al menos así lo anunciaba en un aviso agrupado.
Lo que no menciona el aviso era en qué
material estaban confeccionadas las tazas deportivas. Se podrían pensar que
eran metálicas, pero no lo puedo afirmar. Puede ser que algún lector de Archivo
de autos, como casi siempre pasa, las comprara para colocar en su automóvil al
final de los años sesenta.
En la misma pieza gráfica se mencionaba
que se conseguían en las casas de accesorios o en una determinada
concesionaria. La vieja publicidad apareció publicada en la sección “Frene… Mire… Compre!..” de la revista
semanal Automundo número 146 del 20 de febrero de 1968. De esta forma
abordaremos la temática “aquellas viejas tazas
deportivas” en este fin de semana.
Mauricio
Uldane
Editor
de Archivo de autos
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