El
título es la leyenda del catálogo, que les comparto parcialmente,
en esta nota sabatina del “Garaje Miniatura”. Otro de los
juguetes que supe tener cuando era muy chico, a principios de la década
del sesenta del siglo pasado.
Milarmar
Estuve
preguntándole a Don Google si sabía algo de la marca argentina
Milarmar, pero no me supo traer más que avisos de venta. Avisos
dirigidos a los coleccionistas de juguetes. Los cuales son muchos.
Así
que no encontré data sobre la marca, que estaba registrada por lo
que está publicado en el catálogo. El cual prácticamente es lo único que me
quedó de esas piezas para armar juguetes de todo tipo. No todo tenía
ruedas…
Quise
ilustrar esta nota con una variedad de vehículos que se podían armar con
las distintas partes que venían en los sets que se ofrecían. Los cuales están
descriptos en la última imagen de esta nota.
Los modelos
Recuerdo
vagamente los modelos que podía hacer con el Milarmar. Tampoco tengo en la memoria cuántas
piezas tenía para armar los modelos que se ven en esta nota. No creo que
fuera muchas piezas.
Era
muy chico, pero lo que recuerdo que me gustaba porque tenía tuercas y
tornillos de plástico. Justamente una especie de versión plástica del
Meccano. Aunque algunos lectores lo pueden asociar al Tuercalín.
Un
juguete diferente con modelos ya armados que se podían desarmar, por
tener tuercas y tornillos de plástico. En este caso era más versátil a la
hora de crear modelo, móviles o estáticos.
El catálogo
El
catálogo lo recuperé gracias a la pandemia que supimos conseguir, por la
visita inesperada de Don Covid. Todo tiene su lado bueno, aunque solo
parezca malo. Encontrarme con el catálogo de Milarmar fue un viaje al pasado.
Es
probable, casi siempre pasa, que algún lector tuviera uno de los sets de
Milarmar. Hoy será una pieza de colección, como los avisos que
mencioné antes. Los juguetes son muy atractivos para muchos coleccionistas
en todo el mundo.
Lo
interesante de recorrer las páginas del catálogo, es ver la gran posibilidad
de crear modelos diferentes. Incluso de poder curvar las piezas largas
de material plástico. El cual estimo que era acrílico.
Consideraciones finales
Reencontrarme
con el catálogo fue interesante. En especial para darme cuenta de dónde eran
algunas de esas piezas sueltas que estaban dando vueltas en mi casa. Ahora
entendí de dónde venían.
Lo
había olvidado al Milarmar, eso porque lo tuve de muy chico, seguramente
antes que comenzaran a regalarme los amados Matchbox. Pero por sus piezas
también tenían un costado fierrero. Eso de tener tornillos y tuercas,
aunque fueran de plástico le sumaban puntos.
En
especial cuando uno es chico y la imaginación está a flor de piel. Este
juego era motivador. Un juego de estimulación diría hoy un pedagogo.
En esa época era un juguete entretenido. Hay que ubicarse hace más de 60
años en el tiempo.
Para los que tengan ganas de ver todos los
“autitos de colección” del “Garaje Miniatura”, les dejo el enlace
con la página donde están todas las notas publicadas hasta la fecha: http://archivodeautos.blogspot.com.ar/p/garaje-miniatura.html
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Podés convidarme un cafecito: https://cafecito.app/archivodeautos
Mauricio Uldane
Creador y editor de Archivo de autos
Aniversario 11º / 2011-2022
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