Edgardo Boschi fue uno de los mentores que el Lotus Seven, de origen inglés, se
llegara a fabricar en Argentina bajo
licencia de Lotus Cars Ltd. de Gran Bretaña. Fue la única licencia que
la empresa británica otorgó fuera de su país para el armado de los Lotus Seven.
Lógicamente se adaptó a las condiciones argentinas la mecánica de este auto
fuera de serie.
La trompa del Lotus Seven
que fabricara la empresa Lotus Argentina. Este modelo es de la primera etapa del año 1969. La fotografía es de la revista Panorama del 8 de julio de 1969. |
El motor elegido fue el del Fiat 1500, aunque hay datos que indican que se usó el motor Fiat 1600. No podido establecer cuál de
los dos motores se montaron, o si se usaron los dos motores, dadas las fechas
de armados de los Lotus Seven en Argentina.
Hubo dos
etapas de la fabricación del Lotus Seven en Argentina. La primera fue del año 1970 al año 1975 por una
sociedad formada por Edgardo Boschi
con dos socios más, Jorge Mutio y Richard Vignols. La segunda etapa fue
del año 1983 a 1990 de la mano de la
empresa BGS. La empresa primitiva se
llamó Lotus Argentina SA.
Cuando los directivos de la Lotus Cars Ltd. visitaron la empresa local, que arrancó en el
garaje de Boschi, quedaron muy bien
impresionados con la terminación y prestaciones de los Lotus argentinos.
Incluso se mejoró la tenida con respecto al modelo original inglés. Lo que si
es que se le colocaron amortiguadores más blandos dado los caminos argentinos.
La idea era hacer un auto fuera de serie 100% argentino. Por eso es que se buscó
una mecánica local. Ya comenté el tema del primer motor usado, porque hubo un
segundo motor que fue el del Fiat 125
a partir del año 1973 hasta el final
de producción en el año 1975.
Se usó tanto el motor Fiat como la caja de velocidades, incluso en los primeros
modelos se montaron las ruedas de serie
del Fiat 1500. Más tarde se usaron llantas
de magnesio como se puede ver en las fotos del modelo del año 1974.
Les recuerdo que el Lotus nació como un auto que se
vendía en un kit para armar por los
compradores en un principio en Gran
Bretaña. Eso fue en la década del cincuenta luego en la etapa de
postguerra. Luego se comenzó a vender el auto armado y siempre existió la
posibilidad del kit para armar. En Argentina se lo vendió armado, aunque hubo etapas donde se ofrecía la
carrocería sola, pero no me animo a decir que fueran las mismas empresas
artesanales que lo fabricaron.
El tablero del Lotus Seven
de Lotus Argentina. La fotografía es de la revista Panorama del 8 de julio de 1969. |
Richard Vignols fue a la empresa Lotus Cars Ltd. para conocer a fondo el armado del modelo a
producir en Argentina. Vignols armó de
punta a punta un Seven y una vez aprobado regresó al país. Se trajo un
modelo inglés del que copiaron todo. Carrocería y suspensiones fueron copiadas
a la exactitud para poder fabricar, en forma artesanal, el Lotus Seven
argentino.
Vignols se jactaba en el año 1969 que ningún tornillo era importado, todo el
Lotus Seven local era 100% argentino. El chasis era multitubular de secciones redondas y cuadradas. La carrocería de aleación de aluminio con los
guardabarros y trompa de PRFV (Plástico
Reforzado con Fibra de Vidrio).
La geometría de las suspensiones era similar a las
del modelo inglés, pero adaptadas a los caminos de Argentina con amortiguadores más blandos. La
suspensión delantera era independiente
con trapecio inferior tubular y superior integrado por un brazo y barra
estabilizadora más resortes helicoidales y amortiguadores hidráulicos.
La suspensión trasera era mediante eje rígido con reactores laterales y
soporte en forma de letra “A” más amortiguadores hidráulicos y resortes
helicoidales. La dirección era del tipo
de piñón y cremallera. Los frenos eran a
disco en las ruedas delanteras y a
tambor en las traseras.
Lotus Seven del año 1974
con motor Fiat 125 y llantas de magnesio. La fotografía es del diario Clarín del 20 de abril de 1974. |
La toma de aire del capot en el modelo argentino
estaba ubicada del lado izquierdo
por el motor usado. En el modelo original inglés la toma de aire estaba del
lado opuesto. Esto se puede apreciar claramente en una de las fotografías que
ilustran esta nota donde se encuentran las dos versiones, inglesa y argentina,
estacionadas una al lado de la otra.
El tablero era más
completo que en la versión original y contaba con velocímetro,
cuentavueltas, medidores de presión de aceite, temperatura, nivel de combustible
y amperímetro. Por supuesto que el Lotus Seven tenía solo dos plazas como se aprecia de un auto deportivo nato.
La capota era de PVC de color negro y la rueda de auxilio iba montada en la cola del
auto en forma vertical. En los
últimos modelos llevaron llantas de magnesio en cambio de las de serie de Fiat.
La medida era 13 pulgadas x 5 ½ y los neumáticos eran radiales.
Vista de ¾ de perfil
izquierdo del Lotus Seven del año 1974. La fotografía es del diario Clarín del 20 de abril de 1974. |
Las medidas del Lotus Seven argentino eran las
siguientes: largo, 3.340 milímetros;
ancho, 1.550 milímetros; alto sin la
capota, 1.000 milímetros; distancia
entre ejes, 2.230 milímetros y
trochas delantera y trasera, 1.200
milímetros. La velocidad máxima era, según el motor, de 165 a 178 kilómetros por hora con un
tanque de combustible de 30 litros.
El peso estaba en el orden de los 520
kilogramos.
El anuncio a mediados del año 1969 era que las primeras unidades del Lotus Seven argentino
estarían disponibles a partir del mes de
octubre del mencionado año. Pero parece que recién en el año 1970 se concretaron las ventas. Según
algunos datos solo se fabricaron entre
39 y 51 Lotus Seven en Argentina.
Cada tanto es posible toparse con una de estas unidades fabricadas en forma artesanal en
Argentina bajo licencia de una marca británica. Arrancó casi como su modelo
original, de una forma casera. No logró imponerse dentro del mercado local, que
ha sido esquivo a este tipo de automóviles. En un principio la sociedad
argentina pensaba fabricar 100 unidades anuales. En cambio los constructores
ingleses se conformaban con solo la mitad, 50 autos Lotus Seven.
No se pagaron “royalties” ya que Colin Chapman, mentor de la marca
Lotus, creía que era muy buena
publicidad para su empresa que se fabricaran los Seven en un país de
América Latina. Mike Warner, uno de
los directores de la Lotus Cars Ltd. quedó tan encantado del producto argentino
que era suficiente publicidad para la marca. Lo que tal vez lo terminó de
convencer, no solo fue la calidad del producto argentino, sino el asado
argentino… Que parece que degustó en varias ocasiones.
Las fotografías que ilustran esta nota fueron
tomadas de la revista Panorama del 8 de julio de 1969 y del diario Clarín del 20 de abril de 1974. Ambas publicaciones pertenecen al archivo de datos e imágenes que nutre
las notas diarias de Archivo de autos,
el sitio de los viejos autos que supimos
conseguir.
Mauricio
Uldane
Editor de
Archivo de autos
Archivo de
autos es armado en un ciber por falta de recursos económicos ya que no cuenta
con financiación de ningún tipo.
Un purasangre inglés hecho en argentina. Interesante historia.
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