La definición la pronunció, Tulio Crespi,
ayer domingo 9 de octubre en la edición de Autoclásica 2016. El motivo era
homenajearlo por los 40 años del Salón del Automóvil de París de 1975. Allí
estuvieron expuestos una Tulieta GT Convertible y un Tulia GT. Ambos autos
fuera de serie terminaron acusando sensación.
Las Tulietas GT y Tulia GT expuestas en el espacio Auto Sport Nacional. |
“Soy millonario”, dijo Tulio Crespi, pero
no porque su estado financiero lo acredite. Sino por la cantidad de productos
que ha logrado realizar a la largo de su vida. Incluso en la actualidad que
sigue produciendo en su planta ubicada en Balcarce en la provincia de Buenos
Aires.
Hace unos días Gonzalo Balaguer de
Registro Antique se comunicó conmigo porque estaban en la duda sobre si se cumplían
los 40 años del Salón del Automóvil de París. En realidad se cumplieron 41
años. La muestra parisina se hizo en octubre del año 1975.
En primer plano la Tulieta GT Convertible propiedad de Tulio Crespi. |
Como tenía dos recortes de los diarios La
Nación y Clarín se podía documentar el hecho. No solo eso. Los recortes
digitalizados le fueron enviados al propio Tulio Crespi para que los atesore. Esos
recortes salieron del archivo de datos e imágenes de Archivo de autos.
Pero no fue lo único que se llevó Tulio Crespi
en el homenaje que se le hizo en el espacio Auto Sport Nacional, sitio
compartido por los autos fuera de serie de Argentina, como Antique y Lotus, por
nombrar a dos. La gente organizadora le entregó una plaqueta conmemorativa de
los 40 años de ese Salón del Automóvil de París.
Tulieta GT Coupé de la primera serie y detrás la Tulia GT. |
“Para mí esto es un mimo”, dijo Crespi
cuando dijo algunas palabras luego de la entrega por parte de los
organizadores. Claro que no fue lo único que dijo. Tulio Crespi es una fuente
inagotable de anécdotas, que además las sabe contar. Es un contador de
historias y eso lo hace mucho más atractivo.
Una de las apostillas de ese octubre de
1975 en París fue que al ver el prototipo del Lotus Espirit preguntó el precio.
Le dijeron que costaba 60.000 francos. Cuando volvió a su stand le puso precio
la Tulieta GT: 70.000 francos. El porqué era por la mala terminación que
presentaba el Lotus.
La entrega de la
plaqueta conmemorativa a Tulio Crespi. A su izquierda Gonzalo Balaguer de Registro Antique. |
Además el sitio de las creaciones de
Crespi ocupaban el lugar original de Lotus, que se había bajado de la muestra
por no tener terminado el prototipo del Espirit, que luego trajo de todas
formas. Claro que con las deficiencias que notó Tulio Crespi.
Hasta los directivos de la casa Ferrari
lo felicitaron por el diseño de la Tulieta GT por ser original. Tuvo a cuatro
directivos de Ferrari sentados dentro la Tulia GT. Mirando, investigando,
averiguando cómo estaba construida.
Tulio Crespi feliz con la distinción. |
Pero la mejor anécdota fue la de un
español que estaba enojado por el precio de un Porsche en comparación de la
Tulieta GT. Según él era más linda y más barata que el auto alemán. Claro estaba
de por medio una marca. “Contra eso tenía que competir en el Salón de París”,
nos contó a los presentes Tulio Crespi.
Es un hombre vital, alegre y con fuerza.
Sigue vigente pese a los años transcurridos y los avatares económicos del país.
A mi entender debería haber tenido más suerte con sus creaciones y un mayor
conocimiento, a nivel popular, de sus automóviles. Pero como él dice: “soy
millonario”.
Las fotografías fueron tomadas en el
espacio Auto Sport Nacional el domingo 9 de octubre durante la entrega de la
plaqueta conmemorativa a Tulio Crespi.
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Mauricio
Uldane
Editor
de Archivo de autos
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